El pasado 23 de noviembre se realizó el acto de inauguración del Banco Rojo, un proyecto socio- cultural y pacífico de prevención, información y sensibilización contra el femicidio. En la iniciativa participaron Madres de Pie Mendoza, la Consejería de Género UTN FRM y la Secretaría de Asuntos Estudiantiles.

 

La Facultad se constituyó en una de las instituciones que, en nuestro país, exhiben en total más de 400 de estos bancos. El nuestro quedó instalado en la Plaza de la Memoria de la FRM.

 

Arte con mensaje

 

El banco pintado de color rojo exhibe un diseño de la artista Lu Libertina: “144/ Madres de Pie/ Consejería de Género UTN FRM/ Vivas nos queremos” y la ilustración de tres granadas (frutas) que representan a tres jóvenes mujeres asesinadas, cuyas madres crearon, en su honor, la Asociación Madres de Pie Mendoza. También figura el número 144, que es al que hay que llamar para denunciar violencia de género.

 

La apertura del acto estuvo a cargo del Secretario de Asuntos Estudiantiles, Luis Ellena, quien comentó: “en el país hay alrededor de once Regionales de la UTN que tienen el Banco Rojo”, destacando que “más allá de lo simbólico, de la visibilización de la violencia de género, se lo colocó en la Plaza de la Memoria, con el recordatorio de las personas de nuestra facultad que fueron víctimas fatales en la dictadura; para concientizar no sólo en cuanto a la violencia de género sino también sobre ello”.

 

El espacio donde quedó ubicado el banco está en medio del verde de árboles y plantas y es un sitio acogedor que invita a reflexionar.

 

Madres de Pie

 

“Yo soy Graciela Bianchi, madre de Florencia Peralta”.

 

Así se presentó la presidenta de Madres de Pie Mendoza, como madre de Florencia, una joven mujer, asesinada por su pareja.

 

La asociación Madres de Pie Mendoza se empezó a gestar en 2016, por tres madres que perdieron a sus hijas víctimas de femicidio: Julieta González, Ayelén Arroyo y Florencia Peralta.

 

Relata Graciela: “No podíamos creer lo que nos estaba pasando, la violencia nos había alcanzado a nosotras, tres madres que vivíamos la violencia en nuestra vida cotidiana, pero que la habíamos normalizado y no nos dábamos cuenta”.

 

De ahí en más, las tres madres comenzaron a transitar los Tribunales y fueron víctimas de violencia institucional, “de todo tipo de violencia”.

 

Pero no se detuvieron, el odio, la rabia y la ira transmutaron en sororidad: “por lo que nos había tocado vivir, formamos esta asociación Madres de Pie, con la que ayudamos a mujeres víctimas de violencia, sea la hora que sea. Nuestros teléfonos a partir de la muerte de Florencia nunca más se apagaron”.

 

Luego de las palabras de Graciela, el Decano, José Balacco, relató que “esto (del Banco Rojo) empezó en 2019 en una reunión de Consejo Directivo, donde hice la propuesta” y reflexionó: “donde formamos a nuestros jóvenes en la tecnología, tenemos que formarlos también en el respeto, en la no violencia, en la no agresión en general, pero mucho menos hacia una mujer”.

 

La Consejería de Género UTN FRM

 

Luego de las palabras del Decano, Juliana Bernardo, Coordinadora de la Consejería de Género invitó a “quienes necesiten asesoramiento o ayuda por cuestiones de género y diversidad, que se acerquen a la Consejería”.
La dependencia está a disposición a través programadegenero@frm.utn.edu.ar o por Facebook e Instagram: Consejería de Género UTN-FRM.

 

 

El origen de “La Panchina rossa”

El Proyecto Banco Rojo nació en Italia, a partir de la propuesta de una legisladora de aquel país, el 25 de noviembre de 2016 -Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer-, quien tomó la idea de mujeres mejicanas maquiladoras que utilizaban zapatos rojos para protestar. Se lo denominó “La Panchina rossa”. Así fue instalado el banco rojo como símbolo para ser colocado frente a instituciones públicas como recordatorio y forma de sensibilización de situaciones de violencia de género.